La Comarca de La Ribagorza ha manifestado su enfado al conocer en el día de ayer la propuesta técnica para la candidatura de los Juegos Olímpicos de Invierno 2030. Así lo ha hecho saber a través de su presidente, Marcel Iglesias, quien rechaza cualquier planteamiento en el que no se considere alguna de las instalaciones ribagorzanas como sede para la celebración de competiciones deportivas dentro del proyecto olímpico.

Así, se espera conocer de forma detallada el informe técnico presentado por el Comité Olímpico Español. Según las informaciones conocidas en las últimas horas, han excluido a las estaciones ribagorzanas de Cerler y Llanos del Hospital, situadas en el Valle de Benasque, del planteamiento inicial en la candidatura de Aragón y Cataluña.

Iglesias considera como “inexplicable” la posible ausencia de La Ribagorza” en dicho planteamiento. Benasque es, a ojos del presidente, “uno de los núcleos principales en el sector de los deportes de invierno, en los Pirineo y en España”.

En este punto, resalta la calidad de las instalaciones existentes para el desarrollo de competiciones de esquí y montaña en todas sus modalidades. Todo dentro de una zona con amplia tradición en los deportes de invierno. Ribagorza concentra la mayoría de las cumbres de más de 3.000 metros de los Pirineos.

La presidencia subraya el valor de las inversiones que se han realizado y se van a realizar en las instalaciones invernales. El fin es la modernización y mejora de la ampliación y calidad de los servicios dentro del sector de la nieve, “primordial motor económico y de futuro de la comarca en su estrategia ante la despoblación”.

Respaldo político y social

Marcel Iglesias reitera el “respaldo político y social con el que el proyecto olímpico cuenta en Ribagorza”. En este sentido, el propio Consejo Comarcal de La Ribagorza y la totalidad de los 34 municipios ribagorzanos que manifestaron el pasado mes de julio su apoyo y adhesión total a la candidatura conjunta para la celebración de los Juegos Olímpicos en el Pirineo. Destacando el enorme impacto positivo que tendrían para el Pirineo.

La posible exclusión de La Ribagorza, según Iglesias, supondría “una ilógica determinación ante la implicación que tanto la Comarca como los ayuntamientos ribagorzanos han manifestado con su involucración con el proyecto para el desarrollo económico y social de una zona de alta montaña”. La apuesta olímpica ha sido clara desde Ribagorza por suponer un polo de atracción para consolidar los Pirineos como destino turístico invernal a nivel internacional.