Monzón ha vivido este Lunes de Pascua un espléndido Día de la Alegría. Centenares de personas han participado en la romería a la ermita de la Virgen de la Alegría, que ha recuperado la normalidad tras la suspensión por la pandemia. Las ganas de los montisonenses de vivir una jornada festiva en condiciones de normalidad y el día soleado han contribuido a la participación en una de las fiestas más concurridas que se recuerdan en los últimos años.
Desde las ocho de la mañana, el camino de la ermita ha sido un continuo ir y venir de personas, Muchas ellas cuales han hecho acopio de fuerzas en el punto de reparto de magdalenas, zumo y vino junto a las piscinas. Este año se ha estrenado una zona de aparcamiento en un terreno adquirido por el Ayuntamiento al pie del tozal donde se erige la ermita. A partir de este punto, el recorrido era obligatoriamente a pie o en vehículos especiales para las personas con problemas de movilidad.
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Para reponer fuerzas, en la plaza de la Cruz, al pie del templo, se ha repartido pan y longaniza. La fiesta ha contado con la participación del grupo folclórico Aires Monegrinos. La Misa de las 12 horas ha estado presidida por el obispo de la Diócesis de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez. Ha asistido parte de la Corporación Municipal, con el alcalde, Isaac Claver, a la cabeza.
“Uno de los días más importantes del año”
“Da gusto volver a ver nuestra ermita, con todos los montisonenses disfrutando de este día grande”, señalaba el alcalde, Isaac Claver. Subrayó que el de hoy “es uno de los días más importantes del año y nuestra gente se merecía un día así para disfrutar con familia y con amigos después de estos dos años de pandemia”.
Claver abría un capítulo de agradecimientos: “Quiero agradecer al concejal y a la Comisión de Festejos, todos los voluntarios y a la ermita por su implicación. Así como a la Policía Local, la Guardia Civil, Protección Civil por el dispositivo que han preparado”, agregaba el regidor. Deseaba, a continuación a los vecinos de Monzón “que disfruten y que tengan un buen día”.
Por su parte, el concejal de Festejos, Javier Vilarrubí, se mostraba “muy contento porque es el primer día festivo con normalidad absoluta”. “La gente va con muchas ganas de disfrutar con amigos, familiares y conocidos, tras mucho tiempo sin hacerlo”, decía. “Es la romería más importante de la provincia, con cientos de personas venerando a la Virgen”, enfatizaba el edil.
“El desarrollo está siendo muy importante, con todo el Patronato trabajando, con el almuerzo, el camino del romero, con las jotas que hemos disfrutado”. Agradecía también la presencia del obispo “que nos está acompañando a los monzoneros en este día tan importante para nosotros”. “Salimos ya de una situación muy complicada, con dos años en los que hemos trabajado en el departamento en circunstancias muy limitadas y con muchas ganas del Homenaje a Mont-Rodón y de San Mateo y que Monzón sea una ciudad que acoge eventos tan importantes como este”, finalizaba Vilarrubí.
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