El GREIM ha operado en 14 intervenciones por rescates en el Pirineo durante el primer fin de semana de julio, los días sábado 2 y domingo 3. La mayoría de los accidentes se produjeron de forma mayoritaria alrededor del mediodía, durante las horas más calurosas.
El grupo de Benasque realizó cuatro intervenciones. El primero del sábado tuvo lugar en el glaciar del Aneto, donde un vecino de Valencia de 36 años resbaló tratando de evitar el hielo fósil del pico. De hecho, operarios de montaña de la Guardia Civil ya habían comunicado la semana pasada los riesgos que existían en este lugar. Pese a que el herido siguió las instrucciones, no pudo evitar algunas erosiones en el cuerpo y un posible esguince de tobillo.
Durante el anterior rescate, el helicóptero visibilizó a otras tres personas, dos de mediana edad y un menor, que estaban en una situación complicada en la cima. Ilesos, fueron devueltos al refugio de Renclusa, donde tenían sus pertenencias.
El último rescate del sábado el GREIM de Benasque lo protagonizó un escalador que se había caído en la vía Luz de las Tinieblas, en la cara oeste del Pico Turbón. La dificultad de la localización supuso que los especialistas tuvieran que hacer turnos de descenso con grúa y acceder a pie hasta el herido. Se le diagnosticó una posible fractura en las costillas y el helicóptero lo trasladó hasta el hospital San Jorge de Huesca.
El domingo, el GREIM de Benasque asistió a un vecino de Navarra de 46 años. Este sufrió una lesión en el tobillo en el Ibón de Batisielles. El helicóptero lo rescató y lo llevó hasta Benasque, donde fue atendido en el centro de salud.
En cuanto al GREIM de Boltaña, también realizó cuatro intervenciones en el Parque Nacional de Ordesa. Esta zona es una de las más turísticas y suele contar con una gran afluencia. El helicóptero de asistió primero a un senderista de Zaragoza con signos de agotamiento en la Faja de las Flores (Ordesa).
Pasado ya el mediodía, los especialistas volaron hacia el barranco del Sorrosal (Broto). Esta persona sufrió una posible fractura de tobillo y se le trasladó al Hospital de Jaca. Una hora más tarde, el mismo dispositivo de rescate acudió al refugio de Góriz. Una vecina de Guipúzcoa que sufrió también una lesión de tobillo, pero el médico la asistió en la pradera de Ordesa.
Y, por último, una vecina de Vizcaya de mediana edad sufrió otra lesión de tobillo. En este caso, ocurrió en la Cola de Caballo (Ordesa), y se le trasladó hasta un centro de salud en la localidad de Torla.
Finalmente, los GREIM de Jaca y Panticosa hicieron seis intervenciones. Todas ellas fueron lesiones sin excesiva gravedad.