Que la figura de un funcionario de categoría superior del Ayuntamiento esté en boca de los ciudadanos no presagia nada bueno. Los rumores escalaron hasta acusar al interventor de la parálisis de los proyectos.
El tema ha llegado hasta el pleno, con preguntas de varios concejales para interesarse por su puesto. El interventor es una de las figuras municipales más importantes. Por sus manos pasa la fiscalización de toda la gestión económica-financiera y presupuestaria del Ayuntamiento. También es el encargado de la contabilidad, tesorería y recaudación.
El caso es que el que ejercía el cargo de interventor del Ayuntamiento de Barbastro lo hacía desde marzo de 2019 en comisión de servicio. En realidad, su plaza es de tesorero, pero, a falta de otra persona, ha ocupado la de intervención.
Este mes de septiembre, según ha explicado el alcalde, la Dirección General de Administración Pública del Gobierno de Aragón ha revocado esa comisión de servicio del interventor, como está haciendo en otros casos similares en toda la comunidad autónoma.
La orden llegó el 1 de septiembre, justo antes de las fiestas patronales. Como consecuencia, se tuvo que marchar a su plaza de tesorero y hubo que nombrar uno accidental. Fernando Torres relata que, en ese momento, fue un funcionario de la casa quien ocupó el cargo, hasta que se cogió sus vacaciones.
Mientras, se solicitó a la mencionada Dirección General que abriera la bolsa para dotar al Ayuntamiento de Barbastro de esta plaza. “Tardaron unos ocho días en contestar”, detalla el alcalde. Y en ese plazo, coincidieron en el tiempo, vacaciones y bajas de otros funcionarios que podían ejercer las funciones de intervención de manera accidental. Fue en ese ínterin cuando tenía que celebrarse la Comisión de Hacienda. Ahora, de nuevo, ha sido una funcionaria TAES del Ayuntamiento la que ha asumido el cargo, de forma accidental.
El Ayuntamiento espera que la Dirección General de Administración Pública “nombren a una persona. Si no, cubrimos una baja y dejamos descubierta otra plaza. Queremos tener las tres plazas de habilitados nacionales [Secretaría, Tesorería e Intervención] cubiertas como hasta ahora”, concluye el alcalde. Se abre un nuevo plazo, que se prolongará otro mes. En el pleno, Fernando Torres destacó que se ha hecho esta petición porque si se vuelve a cubrir la plaza con la de tesorero, “se desviste un santo para vestir otro”.
Falta de personal
Estos cambios también terminan siendo un reflejo de la falta de personal en el Ayuntamiento de Barbastro. El alcalde explica que “ha habido áreas en las que sí se ha podido aumentar el personal”. Y cita cultura, administración general o policía. “Bien es cierto que estamos con la modificación de la RTP [Relación de Puestos de Trabajo]”, añade el alcalde. Recuerda que ya tienen “la fotografía de todo lo que hace falta” y tiene claro que “hay que priorizar urbanismo y contratación, que son prioritarias para la casa y están pendientes de un hilo”.
Así, reivindica que “no podemos estar con un solo arquitecto o aparejador. Todos los proyectos recaen ahí, aunque sean externalizados y, además, en el día a día tienen que atender a multitud de vecinos, que llegan con sus problemas”.
De esta manera, están con una nueva RTP, con un “muy buen trabajo con la junta de representantes de los trabajadores”, valor Torres. “Estamos trabajando muy a una porque somos plenamente conscientes del día a día, pero no va tan rápido como quisiéramos”, explica.
Y una vez más, surgen problemas. Torres se refiere a un nuevo real decreto del pasado marzo “que nos impide a los Ayuntamientos contratar personal por obra y servicio. Nos ha hecho polvo, porque para momentos muy puntuales, para cubrir vacaciones, podíamos tirar de ahí”, lamenta.
Por tanto, tan solo queda convocar bolsas de trabajo para cubrir las plazas vacantes. “Hacia finales de año van a salir varias bolsas de trabajo”, afirma. Y concluye que “se está trabajando para poner las prioridades encima de la mesa y ver si poco a poco, podemos tener el Ayuntamiento con por lo menos los puestos cubiertos y, si hay una baja, no quede ningún vacío”.