La diversidad de empresas impide hacer grandes generalizaciones. En cualquier caso, el aumento del coste de la energía es innegable, que ha “hecho que se encarezcan los procesos”, explica Adrián Beroz, presidente de la Asociación Empresarial Polígono Valle del Cinca. Las empresas están en una situación difícil, pues también están caras las materias primas. Por eso, no es extraño que algunas hayan tenido que comenzar a repercutir los costes. “Al final, se frenará el consumo”, vaticina Beroz.
¿Están las empresas optando por el autoconsumo? “Algunas, grandes,sí están haciendo inversiones pero no para llegar a ser autosuficientes”, dice. Y es que la mayoría están muy pendientes de la legislación y de las posibles ayudas. Son grandes inversiones que, opina Beroz, “no te hacen independiente. Y la expectativa global es que a medio-largo plazo la energía vaya barata. Supuestamente se va a estabilizar el mercado”.
Una legislación que impulsa este autoabastecimiento pero que cuenta con inconvenientes. Beroz indica que el decreto deja fuera la producción de materias primas. “Y hay muchas trabas burocráticas”, añade Beroz, en referencia al retorno real de la inversión en instalaciones fotovoltaicas.
En cualquier caso, desde la propia asociación han optado por un proyecto, en dos fases, para dotar a su sede de placas solares. “Queremos paliar el coste de nuestra demanda. La mejor ayuda es la bonificación municipal del 50 por ciento del IBI por la instalación” –añade– “y no tanto por el ahorro. Se espera que dentro de seis meses, para primavera, se prevé que bajará el coste de la energía”. Ellos colocarán las placas en el tejado de la sede, en dos fases. “Veremos el resultado de la primera fase antes de emprender la segunda”, concluye.