Miguel Fleta, tenor lírico nacido en Albalate del Cinca, en la vecina Cinca Medio, se ha convertido en una figura reconocida mundialmente. Su legado es tan fuerte que a día de hoy existen quienes siguen investigando su vida profesional.
Uno de estos fletistas es César Sánchez. Fotógrafo de profesión, ha estudiado en profundidad la figura del ilustre tenor. Materiales de su propia colección se pueden ver ahora en una exposición en el centro de la UNED de Barbastro.
Háblenos de Miguel Fleta.
Podría hablar tanto de él, que resumirlo en tan poco espacio se me hace realmente difícil.
¿Cuál fue el punto álgido de su carrera?
La ópera Turandot, que es la obra póstuma de Giacomo Puccini. Una de las óperas más grandes que se han estrenado en el siglo XX. A pesar de la inmensa gama de cantantes de un alto nivel artístico que había en aquella época, decidieron que Miguel Fleta estrenaría Turandot. Esto supuso un acontecimiento a nivel mundial de un carácter que difícilmente se ha vuelto a dar.
¿Qué otro aspecto destacaría de Miguel Fleta?
Su manera especial de cantar. De muchos ilustres cantantes apenas se sabe cuándo debutaron, pero de Miguel Fleta sí. Debutó prácticamente recién salido de Albalate del Cinca, con tan solo 22 años. Y lo hizo en el teatro Verdi de Trieste, con un éxito aclamador.
Principalmente destacó por sus enormes cualidades vocales, pero también por su manera de expresarse y cantar. Muy diferente a todo lo que había hasta el momento. También deslumbró porque se trataba de un hombre muy joven. Tuvo una carrera y vida corta, pero tan intensa hasta tal punto de que hoy, 100 años después, estamos aquí recordándole.
Destacaba por su voz.
Especialmente por su manera de cantar, muy imitada. Muchos lo han imitado, pero nadie se ha convertido en su sucesor. Por eso sigue estando vigente.
Existe gente que desconoce el mundo de la ópera y dicen: Es que antes se cantaba así. No, antes no se cantaba así. Antes solo cantaba así Miguel Fleta.
Tuvo más éxitos.
Cantó muchas óperas y todas se convirtieron en una creación absoluta porque Miguel Fleta era un creador. Se introducía de tal manera en los personajes, que existen críticas que dicen que el actor superó al cantante. Entonces yo eso no me lo puedo imaginar porque con lo gran cantante que era, es difícil pensar que pudiese haber un actor dentro de él que lo superase. La ópera que lo situó como un referente absoluto a todos los niveles es la ópera Carmen, de Georges Bizet.
¿Qué legado dejó?
Miguel Fleta actuó por todo el mundo. Italia, Estados Unidos, Francia, y sobre todo, España. Su legado se basa en que es el referente actual, todavía, de infinidad de cantantes de todo el mundo.
¿Por qué decidió estudiar la vida de Miguel Fleta?
Mi abuelo y mi padre eran fletistas totales. Entonces, para mí, se trataba como de mi propia familia porque desde niño he oído hablar de él.
Empecé a escucharlo prácticamente con devoción y luego me interesé más a fondo por su vida. He indagado muchísimo y sigo en plena exploración. Cada día averiguo cosas o connotaciones nuevas.
También me ha servido en algún momento dado para desmitificar según qué cosas porque era un personaje más de leyenda que real. Escrito había poco, pero se había hablado mucho de él. Todo lo que muestro en la exposición es investigación propia. Y es la manera de plasmar qué se dijo sobre Fleta en su momento.