Dicen que las primeras veces siempre son especiales. La pequeña Lucía Serra, de apenas 15 meses de vida, realizó su primera excursión con el Club de Montañeros de Aragón-Barbastro. Además, lo ha hecho en una cita muy especial. La niña subió a la ermita de San Bartolomé acompañada de sus padres y la gente del MAB para colocar el belén navideño.
Con raíces en una familia montañera, la joven Lucía fue inscrita al poco de nacer en el club. “Es socia desde que nació. Si nació en septiembre, en diciembre ya estaba inscrita”, comenta David Serra, padre de la criatura. De la misma manera que a su hermano mayor de cinco años, sus padres le han tratado de mostrar aquello que hace a las montañas tan especiales.
Por ello, y más en estas fechas tan señaladas, la pequeña no dejó escapar la oportunidad de subir junto al resto del club de montañeros a poner el belén para celebrar la Navidad. Además, esta fue la primera vez que lo hacía con el club. “Fue la moña de la jornada”, reconoce Serra, entre risas. No es para menos, pues el Club de Montañeros de Aragón-Barbastro reunió a gente de todas las edades para celebrar la actividad, que comenzó en Gavín y finalizó en la ermita de San Bartolomé.
La pequeña Lucía ha comenzado a caminar hace poco tiempo y, desde que descubrió esta nueva habilidad, ha querido explotarla al máximo. De esta manera, intentó recorrer tramos de la excursión a pie, tramos que luego compaginó con la mochila portabebés, o con los brazos de su padre. Pese a todo, ver con la ilusión que la niña subía a la montaña para poner un belén deslumbraba por sí sola.
Finalmente, cumplió su objetivo y la pequeña llegó a la ermita, donde correteó y jugó hasta desfondarse. Además, presenció cómo los integrantes del club, algunos de ellos con gorros de Papá Noel incluido, montaron las piezas del pesebre hasta completar el belén. Finalmente, una vez que se recogió la zona, el Club de Montañeros regresó hasta la localidad de Sabiñánigo. Allí comieron y pusieron punto final a una jornada muy especial para la joven Lucía Serra.