El segundo sábado de mayo está marcado en rojo en el calendario a los pies de la sierra de Guara. Los vecinos de siete pueblos se dan cita en la romería al santuario de Santa María de Dulcis, bajo el amparo de sus cruces y banderas. Ahí acuden desde Buera, Huerta de Vero, Alquézar, Radiquero, Asque, San Pelegrín y Colungo.
Desde primera hora de la mañana se comienza a ver movimiento, para preparar las mesas que después compartirán familias y amigos. De hecho, muchos acuden al entorno del santuario a almorzar.
Según el programa, a partir de las 12’45 horas, se concentrarán las cruces, banderas y romeros en el entorno del santuario. Algunos de ellos mantienen la tradición de ir caminando desde sus casas, como un grupo de vecinos de Colungo. Tras una pequeña procesión, que incluye el famoso movimiento de las banderas ahí congregadas, comenzará la misa a las 13 horas.
Después, los centenares de asistentes a esta tradicional romería a Santa María de Dulcis comparten charla y vermú entre anécdotas presentes y pasadas.
Finalizada la comida, hay programada animación folclórica para terminar la jornada. Aun así, son muchos los jóvenes que continúan este día festivo en la plaza de Buera.