El debate de los candidatos a la alcaldía de Barbastro dio mucho de sí. Este es un resumen de lo que transcurrió el pasado martes, 16 de mayo, en el Centro de Congresos.
Dicen que, en comunicación política, el político debe dedicar un 20 por ciento del tiempo a la pregunta planteada y el 80 por ciento restante al mensaje que quiere transmitir. Aunque a cualquier aspirante a alcalde se le presume cierta solvencia a la hora de contestar sobre temas municipales, no siempre pasa. Y, como consecuencia, una cosa es lo que se pregunta; y otra lo que se sabe o se quiere responder. Los nervios (algunos era la primera vez que se enfrentaban a un debate público, sobre un escenario) y la lectura de algunos de cada una de sus respuestas (a veces sin atender demasiado a la pregunta) marcaron, de esta manera, parte del debate.
El Debate de Barbastro
El Cruzado Aragonés, fruto del convenio de colaboración suscrito, se ha unido este año a la organización de El Debate de Barbastro.
Un debate que Cope del Alto Aragón impulsó en el año 2007 de la mano de la Asociación de Empresarios del Somontano de Barbastro. El debate se repitió en las elecciones municipales de 2011, 2015 y 2019.
En el de este año, celebrado el pasado martes, acudieron a la llamada de El Cruzado y la Cope ocho de los nueve candidatos a la alcaldía de Barbastro. Excusó su presencia el candidato de Estado Aragonés, Bizén Salamero.
Y un ejemplo claro estuvo en la primera pregunta. Cabe recordar que ninguno de los candidatos conocía las cuestiones que se plantearon. Así, cuando la moderadora lanzó: – El problema de la despoblación nos concierte a todos y es prioritario crear condiciones para que una persona pueda desarrollar su proyecto de vida en esta ciudad. ¿Qué le dirían a una familia para animarse a vivir en Barbastro?– las respuestas transcurrieron como sigue.
Comenzó el turno Belén Morales (Federación de Independientes de Aragón, FIA) que, tras afirmar que “la única manera es creando empleo”, desgranó su programa en cuanto a agilizar los trámites administrativos para las empresas que se quieran instalar en la ciudad.
José Luis Parra (Chunta Aragonesista, CHA) aprovechó para resaltar su medida estrella: las 84 viviendas para alquiler asequible en terrenos del antiguo cuartel General Ricardos; a las que sumó el dar prioridad al peatón en el centro de la ciudad y un modelo de eco-ciudad.
Y Ana Barón (Vox) también desoyó lo que se le preguntaba para pasar a hablar de lo que “cuesta abrir cada día un negocio y mantener una familia” y de reducir impuestos y agilizar trámites para las empresas.
Respuestas más centradas
Carlos Domínguez (Partido Aragonés, PAR) centró un poco más la respuesta, hablando de la facilidad de vivienda, los servicios educativos y la posibilidad de un trabajo digno en Barbastro. Por su parte, Belinda Pallás (Ciudadanos, Cs) aludió a que “hay aspectos que tenemos que resolver, como la falta de vivienda”, defendiendo el acuerdo firmado hace unos meses con Suelo y Vivienda para las citadas 84 viviendas. Eso sí, también tuvo tiempo de encajar una de sus propuestas: los cheque-guardería.
Marisol Cancer (En Común Cambiar Barbastro) sí tuvo una respuesta más acorde con la pregunta: “Les convencería hablando de los beneficios de la ciudad: bastante calidad de vida, oferta educativa y el gran entorno”. Añadió ideas de su programa, como la reurbanización de la ciudad con un plan sostenible “para que sea una ciudad más amable de lo que es”.
Daniel Gracia (Partido Socialista, PSOE) contestó con seguridad que “les vendería la ciudad como una ciudad de oportunidades” y, a partir de ahí, “poner soluciones sobre la mesa”. El turno lo cerró el candidato del Partido Popular, PP, Fernando Torres, quien destacó la posición y comunicaciones de la ciudad, su oferta educativa y de salud y las posibilidades de empleo y crecimiento.
En el tiempo de debate libre sobre este tema, Barón le espetó a Torres que “no puede seguir vendiendo humo ni empresas ni vivienda”. El candidato popular le respondió que “vivía ajena a los movimientos del equipo de gobierno”, en referencia a las casas de Suelo y Vivienda ya mencionadas y al proyecto de 33 viviendas sociales en la zona del Lidl.
Un proyecto que, según anunció Parra, “Fernando Torres no ha llegado a firmar”. El actual alcalde se defendió porque dicha firma suponía “hipotecar al Ayuntamiento” y que se desechó por consejo de los técnicos. Parra puso sobre la mesa que “con 19 millones de euros en remanentes, el Ayuntamiento no se hipoteca”.
Ventanilla única para empresas
Fue el primero de los rifirrafes de un debate en el que se vieron puntos en común de varios grupos en la siguiente cuestión: ¿qué le diría a una empresa para que se instalara en la ciudad? En este caso, coincidió la mayoría en señalar las buenas comunicaciones de Barbastro, así como en facilitar y agilizar los trámites.
La provisión de una ventanilla única fue una idea muy consensuada de la que ya se hablaba, como recordó la moderadora, hace unos años y de la que nada se sabe. En este sentido, la candidata de Cs (actual concejal de Desarrollo), apuntó que cuentan con un anteproyecto de una idea que “no es tan sencilla” y que está valorada en 70.000 euros.
En este punto salió a relucir un tema que ya se debatió en pleno. De nuevo fue la candidata de Vox quien abrió fuego: “Señor Domínguez, cómo puede pedir el voto siendo que una empresa estaba a punto de instalarse y gracias a su presidente se fue a Teruel”. Tras un “ese señor ya no está en el PAR”, la defensa llegó de parte de Gracia (PSOE) y Torres (PP). “Las empresas buscan entre varios emplazamientos y tenemos que trabajar en ser los mejores”, dijo Gracia; “Estoy de acuerdo, sin que sirva de precedente –añadió Torres– la decisión es de la empresa”.
Urbanismo y limpieza
Otro punto en el que los candidatos mostraron su unanimidad llegó al plantearse la pregunta de las normativas de urbanismo, basadas en un Plan General Urbano que data de 1987 y del que se han hecho medio centenar de modificaciones.
Gracia (PSOE) tiró de tópico (“celebro que haga esa pregunta”) para mostrar orgulloso que la refundición de estas normativas forma parte de su programa electoral. Una refundición que reclamaron todos los candidatos, introduciendo matices sobre adaptación al cambio climático (En Común) o el Plan de Movilidad. Lo que se constató en este punto fue la necesidad de aumentar el personal en el área de Urbanismo.
Y, como no podía ser de otra manera, la limpieza de la ciudad salió a relucir. Todos coincidieron en la necesidad de mejorar la limpieza de modo global. La candidata de Vox, Barón, habló de “comprobar el estado de contratación”, dando la sensación de que desconocía que la Comarca del Somontano hace el servicio en forma de encomienda por parte del Ayuntamiento.
Quienes lo tenían muy claro fueron los candidatos popular y socialista: el primero, alcalde de la ciudad; el segundo, presidente comarcal. Desde el inicio del mandato se ha hablado de mejorar un convenio que data de hace una veintena de años. Y aunque coinciden en la necesidad de actualizarlo, no se llegó a explicar con claridad por qué no ha salido adelante.
Gracia expuso que “quien paga es el Ayuntamiento y si hay que mejorarlo depende de quien tiene la competencia”. “Me sorprende”, le contestó Torres, quien afirmó que el presidente comarcal tiene sobre su mesa una propuesta de convenio y que desde 2019 se ha incrementado la inversión en más de 100.000 euros. “Se ha solicitado información sobre los costes y estamos a la espera”, le dijo. Aun así, el candidato socialista repitió que “en las liquidaciones está todo lo que se pide” y que es el Ayuntamiento quien tiene que presentar el convenio, no dejarlo sin formalizar, “como otros”.
Domínguez (PAR) llegó a plantear sacar a concurso el servicio, ante la negativa de plano de Gracia (PSOE).
Unanimidades
El sector turístico también tuvo su protagonismo. Ante la pregunta de por qué Barbastro no es el centro de un gran proyecto turístico, los candidatos también coincidieron en señalar las fortalezas de la ciudad y en la necesidad de aunar esfuerzos entre instituciones, pero sin concretar grandes ideas.
“Habría que tener un plan estratégico”, aventuró Domínguez (PAR), en una idea similar al plan director propuesto por Morales (FIA). “No se potencia más por la limpieza”, dijo Barón (Vox). Optaron por mejorar senderos y caminos Cancer (En Común) y Parra (CHA); y Gracia (PSOE) habló de un proyecto de ‘Babastro, ciudad del vino’.
Otro tema en el que los ochos candidatos participantes en el debate estuvieron de acuerdo fue en la atención que requieren Cregenzán y Burceat. Sus vecinos forman parte de la ciudad y deben ser atendidos como tal, argumentaron. Escuchándolos y solucionando los problemas habituales que tienen en cuanto a limpieza, abastecimiento de agua o accesos. E, incluso, hubo alguna propuesta para potenciar ahí la vivienda (Cancer, Morales) y para mejorar el transporte.
Otro tema en el que mostraron acuerdo fue en la falta de opciones de ocio para los más jóvenes, con diferentes propuestas de los grupos: apertura de patios escolares, acondicionamiento de solares con canchas deportivas o un lugar donde escuchar música sin alcohol (En Común). También una nueva casa de la juventud mejor dotada y con más espacio (FIA, Vox); o poner equipamiento en la zona del antiguo cuartel.
Salieron a relucir en este punto la mejora de las instalaciones deportivas. Y una cascada de propuestas en cuanto a actividades: potenciar arte urbano y musical de la mano del PolifoniK, crear asociaciones de grupos juveniles (PSOE). O la creación de competiciones deportivas con los clubes (CHA). El PP defendió proyectos en marcha, como el de la nueva zona deportiva en Las Huertas, con pista de pump track o el del parque de la Memoria, cuyo proyecto incluye pista de skate park.
Un proyecto
La última pregunta planteada en el debate (antes del turno del público) era, a priori, fácil: como alcalde solo puede desarrollar un proyecto, ¿cuál sería? No hubo manera de seleccionar. Quien menos habló de dos.
El edificio de la UNED y el campo de fútbol para Gracia (PSOE); el parque del Recuerdo, el cementerio y el campo de fútbol para Torres (PP). O el nuevo centro de salud y viviendas públicas para Parra (CHA). Para Morales (FIA), la creación de suelo industrial, con varias propuestas. Y la creación de un campus de FP y universitario para formar jóvenes para Barón (Vox). Aprobar el presupuesto y reorganizar la Casa para Domínguez (PAR). Y además de esta idea, ampliar el polígono industrial Valle del Cinca, la vivienda con SVA y la FP básica de cocina para Pallás (Cs).
En el minuto de oro que cerró las intervenciones de este debate municipal de 2023, todos aprovecharon para resaltar alguna propuesta y pedir el voto.
Un enfado y la organización del Ayuntamiento
En el fragor del debate sobre las empresas, la candidata de Vox hizo una referencia a que después del día 28 “podrían desaparecer” partidos. Y citó a Ciudadanos, la FIA y al propio PAR. La candidata de FIA se sintió ofendida y trató de que Barón pidiera disculpas por esta afirmación. Una cuestión que la moderadora consideró que no era del interés del público y mandó cortar sus micrófonos mientras lo discutían.
En la recta final del debate se habló de la organización del Ayuntamiento. Un tema que salió de soslayo hablando de urbanismo, con la necesidad de aumentar personal. Y que regresó con una pregunta hecha desde el público y muy directa: ¿Por qué no funciona? El alcalde y candidato popular explicó que “el problema es la falta acuciante de personal y la dificultad para cubrir las bajas”, algunas de ellas de técnicos superiores.
En el debate también hubo tiempo para momentos distendidos. En dos ocasiones, la moderadora pidió a los candidatos votar a mano alzada. La primera fue para poner sobre la mesa: Si tiene contactos de empresas que puedan venir y no sale elegido, ¿las traería igualmente? Unanimidad plasmada en la foto.
En la segunda ocasión, fue la pregunta de un miembro del público. Quería saber si los candidatos sabían dónde estaba ubicada la calle Santa Teresa. Aquí, alguno que otro se mostró más dubitativo a la hora de levantar la mano.
Para finalizar, no pudo faltar un cálido aplauso para el técnico del Centro de Congreso. Julio Díaz se encargó de que el sonido fuera el que tenía que ser para escuchar a los candidatos.