El Geoparque Mundial UNESCO Sobrarbe-Pirineos ha pasado un riguroso examen para revalidar su título en la red de geoparques durante cuatro años más. Es un proceso de revalidación mediante el que la UNESCO comprueba la calidad de las infraestructuras y de los servicios que ofrece el Geoparque.
Durante cuatro días, el comité evaluador ha recorrido todo el territorio para revisar que se mantienen los estándares de calidad que exige la UNESCO a estos espacios. Dos evaluadoras, del servicio geológico británico y del Geoparque Karawanken/Karavanke de Eslovenia y Austria, han visitado Sobrarbe, acompañadas por los técnicos del Geoparque Sobrarbe-Pirineos.
“Han sido unos días muy intensos de trabajo”, explica Ánchel Belmonte, coordinador científico del Geoparque Sobrarbe-Pirineos, en los que se ha revisado la estructura de gestión del Geoparque, desde el nivel administrativo hasta el científico. También las acciones que se llevan a cabo para la investigación, divulgación y ciencia. O las actividades educativas que organiza este espacio, que en Sobrarbe abarcan a todos los niveles educativos, desde los más pequeños hasta los adultos a través de diferentes programas que se desarrollan en los centros escolares y para el público en general a lo largo del año.
Aspectos que se valoran
Las evaluadoras también han revisado las acciones realizadas para dar visibilidad a este espacio, como las infraestructuras y señalización con la que cuenta, pero también a través del desarrollo socioeconómico que supone el Geoparque Sobrarbe-Pirineos en el propio territorio. En este caso, el Geoparque cuenta con el programa de entidades colaboradoras, a través del cual ofrece su apoyo a todas las empresas adheridas, que son actualmente un total de 144 entidades de todos los sectores, con la que se trabaja de manera coordinada en una promoción conjunta sobre impulso y desarrollo del ecoturismo, difusión de los productos y productores locales, gastronomía, asistencia a ferias, etc…
El geoparque Sobrarbe-Pirineos cuenta con otros programas para difundir y conservar el patrimonio cultural, con su propuesta sobre el megalitismo. Y las relaciones que mantiene con el resto de figuras UNESCO, que en Sobrarbe se encuentran todas, o la cooperación con otras administraciones públicas o asociaciones privadas son otros de los elementos que se han puesto bajo la lupa.
La decisión se tomará en septiembre
Ahora, las evaluadoras que conforman ese comité redactarán un informe con una propuesta de veredicto. Y será el Consejo de Geoparques de la UNESCO, que se reúne en septiembre, el que tome una decisión. “Esta podrá ser conceder al Geoparque Sobrarbe-Pirineos una tarjeta verde, lo que supondrá que mantiene esta distinción durante cuatro años más, con alguna mejora que pueda introducir, porque no existe ningún geoparque perfecto que lo haga todo todo bien, aunque el nuestro casi lo es”, afirma con humor Belmonte.
O bien, recibir tarjeta amarilla, si las evaluadoras han detectado mejoras sustanciales e importante, para lo que se le dará un plazo de 2 años al Geoparque para subsanar esas cuestiones y conseguir su carta verde. “Esas son las dos opciones, porque la carta roja se deja solo para situaciones muy extremas, cuando no se ha corregido lo indicado en la tarjeta amarilla o el geoparque en cuestión no cuenta con presupuesto para su desarrollo o ocurre alguna situación muy calamitosa”, explica el coordinador científico.
El deseo de continuar en la red de geoparques
Desde la dirección del Geoparque Mundial UNESCO Sobrarbe-Pirineos esperan obtener la tarjeta verde y renovar su distinción como Geoparque Unesco durante 4 años más, ya que la valoración que hacen tras el paso de las evaluadoras por Sobrarbe es buena. “Hemos sacado una impresión muy favorable sobre sus reacciones porque han tenido comentarios muy elogiosos sobre las acciones que realiza el Geoparque y las actividades desarrollada en el periodo revalidado en estos últimos 4 años. Queremos ser optimistas respecto al tipo de informe que redacten y la propuesta que hagan ante el consejo de la UNESCO”, resume Ánchel Belmonte.
Para llegar hasta aquí ha sido imprescindible la colaboración de todos los actores del territorio. Los que trabajan por mejorar el espacio y ayudar a su difusión y conocimiento, al público que asiste de manera masiva a todas las acciones que se organizan, a las entidades colaboradoras del Geoparque, a administraciones públicas y asociaciones privadas. Es un apoyo por parte de todo el territorio que no ha pasado desapercibido antes las evaluadoras.
