Aunque desde antes de las ocho de la mañana ya se estaban instalando los puestos, la Candelera comienza “oficialmente” a las 10’30 horas en la Catedral, con la bendición de candelas y caretas. Un año más, el grupo Tradiciones se ha encargado de llevarlas hasta el altar mayor de la Catedral. Ahí, el sacerdote Antonio Mozás ha recordado que se trata de “la fiesta de la purificación de María y de la presentación de Jesús en el templo, siguiendo la ley de Moisés”.
Mozás también ha rememorado que la feria se remonta a 1512, cuando la reina Germana de Foix dio el privilegio a la ciudad para celebrar lo que hoy es “la feria más importante de Aragón, de la que podemos presumir”.
A continuación, el sacerdote se ha dirigido a los alumnos de 3º y 6º de Primaria del colegio Escolapios que, por segundo año, asisten a este acto de bendición en la Candelaria. “La llama de la vela es pequeña, pero si se apagan las luces, ella sola es una señal”, les ha dicho. “Que nosotros seamos esa velita para animar a los demás a que la vida valga la pena”, ha concluido.
Entre el público, representantes políticos de todos los colores. Al acto ha acudido la consejera de Bienestar Social y Familia del Gobierno de Aragón, Carmen Susín; el alcalde, Fernando Torres; varios concejales de la corporación municipal, consejeros comarcales y alcaldes del Somotano, entre otras autoridades.
Candelera: referente y punto de encuentro
Torres también ha destacado la antigüedad de la feria, que “ha sobrevivido a guerras y pandemias”, referente en Barbastro y en las comarcas limítrofes como un punto de encuentro. Además, ha recordado que a la bendición en esta feria de la Candelera de las velas, se suma el de caretas, por su cercanía con la fiesta de Carnaval.
Carmen Susín ha confesado que es “habitual” a esta feria. “Es bonito ver cómo se mantienen las tradiciones, que forman parte de nuestra identidad cultural”, ha dicho. Y ha subrayado también que se trata de una cita “que hace comunidad” y que es “reflejo de la pujanza del comercio y hostelería, referentes en Aragón”.
Después de la bendición
Finalizada la bendición, llega el momento de recorrer las calles de la ciudad para encontrar las mejores ofertas de feria de la Candelera. Una vez más, cerca de 300 puestos ocupan diversos espacios, por sectores, desde la plaza Aragón y el Coso hasta avenida Pirineos, la plaza del Mercado y plaza Diputación hasta la plaza San Francisco. Y también hacia Corona de Aragón y la plaza del Sol.
A partir de las 12 horas se reparten las candelas y caretas que han pasado por la bendición en la Catedral. El grupo Tradiciones se ocupa de esta tarea, mientras que los miembros de la Asociación Folclórica del Somontano recorren las calles con su música.