El Ayuntamiento de Monzón ha emprendido las obras en el paseo San Juan Bosco, que va a suponer la eliminación del carril de servicio en esa vía. El proyecto pretende reordenar el tráfico en el cruce de este paseo con la calle Azucarera, un punto que soporta un importante volumen de vehículos y peatones.
“Actuamos en una arteria principal con mucho tráfico, mejorando la seguridad en esta zona y reduciendo la posibilidad de accidentes”, destaca la concejal de Urbanismo, Nuria Moreno. Junto con el alcalde de Monzón, Isaac Claver, visitaron este lunes el lugar. Con estas obras de reurbanización se suprime el carril de servicio en el paseo San Juan Bosco y, además, tal y como, subraya Moreno, “crearemos 15 nuevas plazas de aparcamiento”.
Moreno añade que esta obra “se enmarca en el estudio de tráfico que ya realizamos y en el Plan de Movilidad Sostenible”. Con los trabajos “se facilita el giro a la izquierda para entrar en la calle Azucarera y también se podrán incorporar de esta calle al paseo San Juan Bosco con total seguridad”, explica la edil de Urbanismo.
Supresión del carril de servicio del paseo San Juan Bosco
El proyecto de reordenación de tráfico en el paseo San Juan Bosco incluye, así, la supresión del carril de servicios en este tramo, y la creación de nuevas plazas de aparcamiento. En total, el Ayuntamiento de Monzón invierte 128.772,48 euros, de los que 70.400 los aporta la Diputación Provincial a través de su Plan de Obras y Servicios.
El proyecto ha sido redactado por la empresa local AB Ingeniería Civil y lo acomete la empresa Hormigones Grañén en un plazo de dos meses.
El objetivo, mejorar las condiciones de seguridad viaria en este tramo de la ciudad, a la vista de la gran cantidad de movimientos de vehículos que se producen en este cruce. Un cruce en el que hay circulación en ambos sentidos en el paseo, un sentido en la vía de servicios, la entrada y salida a la calle Azucarera y los pasos peatonales.
Para mejorar todo ello, se suprime el carril de servicio en el paseo San Juan Bosco, se incorporan dos espacios de espera, se amplían las orejas aceradas y se reducen los pasos de peatones, unificando dos en uno. Además, se modifican las aceras hasta el paso de cebra que se ubica frente a la escuela oficial de idiomas. Todo ello permite sumar una quincena de plazas de aparcamiento.
Afecciones de las obras
Mientras duran las obras se producen algunas afecciones al tráfico. Así, se prohíbe el estacionamiento en el paseo San Juan Bosco desde la calle Santiago hasta el conservatorio en el lado de la residencia Riosol, y en el lado del parque en la zona próxima al cruce con la calle Azucarera. La empresa constructora habilitará los desvío de tráficos provisionales.
Además, queda restringido el acceso al carril de servicio entre los números 11 y 21 del paseo San Juan Bosco. Solo se permitirá la entrada y salida a los residentes.