La investigadora Paloma Lanau tomó como punto de partida su tesis (Arte esquemático en las Sierras Exteriores Pirenaicas) para continuar con la labor que el Museo de Huesca realiza periódicamente en el Parque Cultural del Río Vero. Y con la ayuda del espeleólogo Mario Gisbert y el escalador Alex Puyó, en diciembre de 2020 comenzó a realizar prospecciones en el término municipal de Colungo. El resultado, 13 nuevos abrigos con pinturas rupestres: 12 de arte esquemático en el Tozal de Mallata y uno de arte levantino en el barranco de Fornocal. Los resultados se presentaron el pasado jueves en el Congreso de Arqueología y Patrimonio Aragonés.
“No habían sido visitados por su difícil acceso”, explica Lanau, quien incide en que tuvieron especial cuidado en evitar anclajes artificiales, ya que es un espacio protegido. Y aun así, encontraron zonas con numerosos puentes de roca, que permitían el paso sin anclajes y que les llamó la atención.
Los abrigos
Los nuevos abrigos son 13. Uno de ellos, el único con arte levantino, se halló en el barranco del Fornocal. “Es de gran interés; se distingue una cierva, con muy mala conservación del pigmento, y también dos antropomorfos, que se corresponden con otros del Alto Aragón, con figuras estilizadas con poco detalle y con el cuerpo inclinado hacia delante, lo que transmite movimiento”, explica la experta.
De los abrigos investigados en el Tozal de Mallata, todos con muestras de arte esquemático, Paloma Lanau destaca dos. El primero, el denominado Mallata VI, por “la gran cantidad de motivo figurativos” que acoge en un espacio de muy pequeñas dimensiones. El segundo, la cueva de la Mezquita o Palomera. “Ha sido un hallazgo realmente impresionante. Es una cueva muy antropizada”, señala.
Explica que en ella se han localizado escalones tallados y cubetas excavadas en la roca y conectadas con canalillos en la pared, “suponemos que para captar el agua”. Además, es la única donde las pinturas localizadas son negras y no anaranjadas. “No era una cueva de habitación, pero se ve que fue frecuentada”, explica Lanau. Tambien se localizaron aquí restos de cerámica, que podrían ser del Bronce antiguo o medio.
Conclusiones
Paloma Lanau cuenta que “lo más interesante es la concentración de abrigos juntos y con pintura”. Y entre lo novedoso, la aparición de nuevos temas que no se conocían: “Hay más de 60”, especifica la investigadora. Cabe entender temas como motivos o tipo de figuras, ya que el arte esquemático “no es un arte narrativo como el levantino”.
Lanau finaliza diciendo que ahora queda un “panorama muy abierto. Pensábamos que por ser una zona muy prospectada, ya no había nada más. Y ahora se ve que queda mucho por descubrir”, avanza.
Sin embargo, es consciente de que “es muy costoso”, dado que se encuentran entre barrancos, con una vegetación muy cerrada. En cualquier caso, ahora queda organizar toda la documentación que ha generado la investigación de Paloma Lanau y su equipo, “incorporarlo al Corpus del abrigos del Parque Cultural del Río Vero y así quede a disposición de futuras consultas”, concluye la experta.