La UD Barbastro protagonizó un gran triunfo este domingo al imponerse por 0-1 al Éibar B, en un duelo disputado en las instalaciones de Elgoibar. Esta victoria permite al equipo rojiblanco respirar en su lucha por mantener la categoría.

El encuentro se perfilaba como un desafío complicado para los visitantes, que se medían a uno de los equipos más destacados de la competición, situado hasta entonces en el segundo lugar de la clasificación. Desde el inicio, los jugadores dirigidos por Martínez saltaron al terreno con determinación y el objetivo claro de sorprender a su rival.

El partido arrancó con ambos equipos midiéndose cuidadosamente, buscando cómo desequilibrar al oponente. Fue en el minuto 15 cuando llegó la primera ocasión clara del conjunto local, que obligó al guardameta Arnau Fábrega a intervenir con una parada crucial en un mano a mano. A pesar de la amenaza inicial, fueron los visitantes quienes lograron adelantarse en el marcador. Un disparo desde fuera del área de Nico Magno, uno de los nuevos fichajes barbastrenses, perforó la portería del Éibar, estableciendo el 0-1.

El Barbastro se mostró firme en el tramo final de la primera parte, cerrando espacios y minimizando las opciones ofensivas del equipo local. Con esta solidez defensiva, los jugadores se dirigieron a los vestuarios al descanso.

Segunda parte del Barbastro – Éibar B

En la segunda mitad, el Éibar B intentó por todos los medios revertir el marcador adverso. Pese a los esfuerzos y a las diversas aproximaciones, el equipo rojiblanco logró neutralizar cada intento, mostrando una defensa organizada y efectiva. Una de las jugadas más destacadas del segundo tiempo llegó en el minuto 83, cuando una combinación entre los refuerzos recientes, Binke y Sola, generó una ocasión que no pudo ser capitalizada por falta de precisión en el remate.

El duelo finalizó con la expulsión de Dani Martínez en el minuto 90, pero el marcador no se movió. Con este resultado, la UD Barbastro logra una victoria que les permite mantenerse en la lucha por la permanencia, mientras el Éibar B ve interrumpida su buena racha.