Las hogueras en honor de los santos barbudos (san Victorián, san Antón y san Sebastián) iluminaron los pueblos del municipio de Aínsa-Sobrarbe en este 2025. El pasado lunes 20, además, Aínsa celebró su fiesta pequeña en honor de San Sebastián, tras una noche de fuego y cenas a la brasa repartidas por distintos barrios de la localidad.

Las citas comenzaron el pasado sábado 11 de enero con la celebración de san Victorián, santo que da nombre al monasterio más antiguo de España ubicado en el municipio de El Pueyo de Araguás, muy próximo a Aínsa. Antaño se veneraba a este santo con la procesión que se realizaba desde Aínsa al propio cenobio y se conocía como la fiesta de los solteros.

El siguiente santo que se veneró fue san Antón, en la plaza y calle Mayor de Aínsa, mientras que en Usana, Paúles de Sarsa, Arcusa, Castejón de Sobrarbe, Camporrotuno, Coscojuela de Sobrarbe, Latorrecilla y La Pardina también se encendieron las hogueras para compartir una fría velada, acompañada de viandas autóctonas. Antiguamente, en esta fiesta de la bendición de los animales se visitaba la iglesia para recibir el agua bendita.

San Sebastián es, por su parte, la fiesta de invierno por excelencia de Aínsa. Se nota en sus barrios, ya que por todos ellos se encienden hogueras la tarde-noche del 19 de enero y se junta la vecindad. Esta fiesta se conocía como la fiesta de los casados. La tradición ha evolucionado hasta llegar a nuestros días, en que tras las hogueras, la jornada del 20 de enero se reúnen casi doscientas personas para la comida popular, previo reparto de la torta de caridad.

La residencia de Aínsa se enciende de tradición

Uno de los lugares más especiales donde se prendió la llama de la hoguera fue en la residencia comarcal de mayores de Aínsa. Allí elaboraron el mondongo durante los últimos días. Las personas residentes, con su sabiduría, se pusieron manos a la cocina para elaborar tortetas, chorizos y longanizas acompañadas por las cuidadoras. Se trata de una de las muchas actividades que se realizan y que tienen gran acogida por parte de las personas mayores.

En Coscojuela de Sobrarbe, Guaso y Gerbe celebraron, igualmente, este santo. Y en Santa María de Buil y Camporrotuno lo harán en los próximos días. “Estamos muy contentos de que se mantengan las tradiciones del encendido de las hogueras en todos los rincones del municipio. Se trata de una ocasión muy singular en la que los más veteranos pobladores acogen a los nuevos residentes que se imbuyen en las costumbres de los pueblos”, explica Luis Lascorz, concejal de Festejos. 

“En el calendario municipal de actividades de carácter histórico y tradicional tienen mucho peso. La elección de Aínsa como Best Tourism Villages viene respaldada, entre otras cuestiones, por preservar tradiciones como éstas. Además, en la agenda 2030 el objetivo doce es la producción y consumo sostenible, cuestión en la que trabaja el Ayuntamiento de Aínsa-Sobrarbe desde distintos enfoques y que queda reflejada en estas actividades” continúa el concejal. 

Las hogueras seguirán siendo elemento destacado de los actos que se acercan, como es la Ferieta de Aínsa y la Feria de la Trufa los próximos 1 y 2 de febrero, rememorando la importancia que tuvo la villa en la actividad comercial del Pirineo y de Aragón.