Sinceridad, transparencia, apertura, comunión, fraternidad son algunas de las palabras con las que el obispo de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez, describe el encuentro con el Santo Padre en el marco de la visita Ad Limina Apostolorum. Los obispos de la Provincia Eclesiástica de Zaragoza, junto a los de Santiago de Compostela, Oviedo, Burgos y Pamplona y Tudela, se reunieron el día 16 con el papa Francisco en su biblioteca particular.
“Ver como el Papa te recibe en su casa, tan afable, te sienta y pide que se forme un círculo como hacemos en las casas para la tertulia. Fue emocionante”, subraya. Dos horas y media se prolongó este intercambio de pareceres, “en un clima paternal, fraterno, de transparencia” del que confiesa sentirse “reconfortado”. El Papa saludó y despidió personalmente a cada uno de los obispos. “Le pedí bendiciones y oraciones para nuestra diócesis”, añade al hacer un balance “muy rico y esperanzador” de su primera visita Ad Limina como obispo de Barbastro-Monzón. En la anterior, fue anfitrión de los obispos españoles como rector del Pontificio Colegio Español San José de Roma.
Lo visible y lo invisible
La visita Ad Limina incluye también informar sobre la situación de la Iglesia en la diócesis correspondiente. Un análisis que se refleja en el informe elaborado sobre dos ejes: coordenadas visibles e invisibles. En las primeras, se refieren las notas estadísticas acerca de cuestiones como la población y geografía, sacerdotes, educación católica, catequistas, institutos de vida religiosa, laicos, etc. En las segundas, nuestro obispo ha querido recoger esas características intangibles pero determinantes para saber cómo es esta diócesis. Su perfil sociodemográfico e histórico, su carácter martirial, la importancia de la religiosidad popular, la apuesta por los apóstoles de calle, el paso hacia una “gran familia de familias” o la reciente reestructuración diocesana y pastoral.
“Le pedí bendiciones y oraciones para nuestra diócesis», explica el obispo haciendo un balance «muy rico y esperanzador» de la visita”
Ángel Pérez PueyoObispo de la Diócesis Barbastro-Monzón
Los obispos han completado una intensa agenda que, del 13 al 18 de diciembre, comenzaba cada mañana con la celebración eucaristíca. Así, los 24 obispos del noroeste español, han celebrado la eucaristía en las cuatro Basílicas Romanas: San Pedro, San Juan de Letrán, Santa María la Mayor -donde presidió el arzobispo de Zaragoza, Carlos Escribano- y San Pablo Extramuros.
En horario de mañana y tarde han mantenido reuniones en los dicasterios de la curia romana. Desarrollo Humano Integral, Doctrina de la Fe, Clero, Institutos de Vida Consagrada, Educación Católica, Culto Divino, Laicos, Nueva Evangelización, Familia y Vida, Comunicación y la Secretaría de Estado, entre otros.
Causa martirial
Don Ángel aprovechó su estancia en Roma para acudir a la Congregación para los Santos, con la postuladora de la Causa de Beatificación de 249 mártires diocesanos, y recibir el esperado “Nihil Obstat” de la Santa Sede. Con este nuevo paso en el proceso abierto del que el presbiterio diocesano es la parte actora. Se ha programado para el próximo Martes Santo la apertura diocesana de la Causa de Beatificación de estos 210 sacerdotes, cinco seminaristas