«Nosotros somos unos padres que intentamos que nuestros hijos disfruten del fútbol», subrayaba Eric Vega, presidente de la Agrupación Deportiva Barbastro Base, en el momento previo a la entrega de premios. Vega quiso agradecer el esfuerzo de las empresas locales que «han ayudado a sacar hacia adelante el fútbol base» durante todo este tiempo, en especial en el último año y medio. «Sin ellos sería prácticamente imposible llevarlo a cabo», aseguraba.
El discurso de Vega destacó una serie de pautas que, ya no solo en el fútbol, sino en el deporte, son de obligado cumplimiento. En ese sentido, resaltó el valor de la «confianza» haciendo referencia a los padres y madres de los jugadores, por el hecho de «apuntar a sus hijos a la actividad».
Otro valor a tener en cuenta es la «dedicación» que tiene cada uno de los jóvenes cuando se propone reunirse con sus compañeros para formar un equipo, pero también la dedicación de los entrenadores. Esa figura, la del entrenador, «que pasa muchas horas con nuestros hijos intentando sacar lo mejor de ellos. Lo hacen bien o regular, pero siempre de la mejor manera posible y por eso ya es de agradecer». El tercero y último, «el más importante para nosotros», tiene que ver con la «ilusión, ese valor que está representado por todos esos niños y niñas que suben al campo de fútbol para aprender, disfrutar, luchar y competir». En ellos, aseguraba, «se sustenta esta fiesta y el hecho de que estemos aquí».
Los galardonados
Cada entrenador, desde el de los ‘babys’ hasta el juvenil de la AD Barbastro Base y de la Peña Ferranca Hermanos Argensola, entregó a uno de sus jugadores el galardón por sus valores dentro y fuera del césped. En categoría ‘Babys’, Adil Campo entregó el premio a su jugador Pau Vega Domínguez. Álvaro Armisén Oliva, prebenjamín, recogió el trofeo a manos de Adrián Alquézar. En la misma categoría, pero perteneciente a la Escuela deportiva Hermanos Argensola, Mario Margalejo Plaza obtuvo el premio.
Los protagonistas en benjamines fueron Abril Cerezuela Ferrer (Peña Ferranca-Hermanos Argensola), Mateo Santiago Fierro (Benjamín B) y Nicolás Pardenilla Callejas (Benjamín A). Rafa Giménez, Adrián Alcaraz y Piki Corral, sus preparadores respectivamente, les dieron el premio. Alicia Puy se los hizo llegar a Noel Buil Romero (Benjamín de la Escuela deportiva Hermanos Argensola) y a Diego Cuello Campo (Peña Ferranca).
En alevines, Mario Almazor Solanas, Unai Laínez Pérez (quien no pudo asistir al acto al estar confinado en su casa) y Daniel Mariñosa Andreu recogieron unos galardones entregados por sus entrenadores Jorge Pérez, Dani Mateo y Aarón Marquina. Julia Arner Guillén (Peña Ferranca Hermanos Argensola) fue premiada en categoría alevín femenino, mientras que Juan Salva Omenat, lo hizo en categoría alevín masculino.
En infantiles, trofeos para Angelina Giménez Martínez, Daniel Encuentra Vinos, Joussef Basim Ziani, y Javier Andreu Sampietro. En cadetes, premios para Sara Lacambra Tomás, Iván Millán Castillo y Hugo Valle Pueyo. Por último, los juveniles Paula Quintilla Campodarve, Jorge Boned Mometón, Pablo Buil Calvo y Hugo Tortajada Salamero, recogieron sus galardones en la V Gala.
Abel Salas, Carlos Quintilla, Javier Fernández, Moustafá Touré, Manuel Olivera y Pablo Buil son los juveniles que finalizan su etapa en el fútbol formativo. Cada uno de ellos recibió una camiseta de la AD Barbastro honorífica en reconocimiento a su paso por todas y cada una de las categorías que componen el fútbol base.