Cáritas Diocesana Barbastro-Monzón ha detectado nuevas necesidades en materia de empleo, brecha digital, necesidad de apoyo emocional y concesión de ayudas de urgencia en los más vulnerables con motivo de la pandemia. Otros bienes de primera necesidad también se ven comprometidos por esta carencia (alimentación, salud, vestido o transporte) mientras que en estas fechas navideñas, las cifras de consumo se disparan en una sociedad digitalizada que excluye a quienes no disponen de conexión suficiente o de un dispositivo conectado a la red, y de habilidades para manejarse en estas nuevas autopistas, lo que supone una pérdida de oportunidades para acceder al empleo, la educación, las ayudas públicas o las propias relaciones sociales.

DATO

1.600

personas han sido atendidas por el programa de acogida de la entidad dando aproximadamente 5.500 ayudas a fecha de hoy

Los portales (no solo Belén)

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En el programa de Acogida de la entidad han atendido a un perfil donde predominan personas que nunca antes habían acudido a Cáritas. Con una media de edad entre los 35 y 45 años, han dado cobertura a 1.600 personas aproximadamente con la concesión de 5.516 ayudas a fecha de hoy. En otros casos, se encuentran esperando ayudas públicas, como el Ingreso Mínimo Vital. Y otros que no pueden optar a las mismas, siendo la entidad quien cubre esas lagunas junto con los Servicios Sociales comarcales de cada zona.. Hay un alto número de personas latinoamericanas que presentan dficultades económicas y se encuentra en situación irregular (30%) o asilo (20%). 

Salud mental

La crisis sanitaria ha supuesto un problema de salud pública para los más vulnerables. Los colectivos en riesgo o exclusión social son propensos a producir un incremento muy importante en la incidencia de diferentes trastornos mentales o patologías de algún tipo. Por ello desde Cáritas Diocesana se detectó la necesidad de realizar esta ayuda.

Se han llevado a cabo un total de 152 atenciones este año en materia de apoyo emocional. Esta actuación se basa en la atención de casos individuales y grupales, orientado a personas y familias en riesgo de exclusión social. También tiene un carácter preventivo para la detección precoz de factores de riesgo. Y la previsión de situaciones de desprotección y de exclusión social que afectan a este perfil de población.

Empleo

Por otro lado, para paliar la brecha digital y reforzar su educación curricular, la atención en el programa de infancia y juventud ha ascendido a un total de 245 menores. La precariedad laboral y la brecha digital en los adultos es una constante. El programa de empleo de Cáritas Diocesana ha atendido a un total de 444 personas mediante acompañamientos grupales, orientación, prospección y formación ocupacional. El perfil mayoritario son mujeres (70%) entre 35 y 45 años con cargas familiares. El porcentaje de personas insertadas en el mundo laboral ha sido de un 32,65%.