Cooperación expositiva con los niños de Graus en Espacio Pirineos. El proyecto ¿Y si dibujamos barcos? tiene un precedente exitoso, el proyecto ¿Cambiamos Cromos? que se desarrolló en el Espacio Pirineos en mayo de 2022. En aquella ocasión se presentaba un mural formado por 500 acuarelas de Rafael Romero con la temática de “pájaros”.
Ahora Espacio Pirineos vuelve a contar con la colaboración de Rafael Romero, artista defensor del arte participativo. En esta ocasión, la participación se ha incrementado con las imágenes de barcos de alumnos de 3º y 4º de ESO de l’Escola Assís de Premià de Mar (Barcelona) y de alumnos de 1º y 2º de Bachillerato Artístico del IES Reino Aftasí (Badajoz). Así como con los niños del Centro de Arte Can Castells de Sant Boi de Llobregat (Barcelona) y de la L’Assoziazione Artístico-Culturale Mir’arti-APS de Mira (Ve) (Italia) , además de varios artistas internacionales invitados (España, Argentina, Uruguay y Italia). La inauguración tendrá lugar el domingo 13 a las 19 horas.
Así pues, se vuelve a invitar a los artistas a participar en este proyecto que durante el mes de mayo se llevará a cabo en Espacio Pirineos, para que puedan venir a pintar sus propios barcos y crear un gran exposición colectiva.
Cooperación expositiva
En este juego de la co-creación, la dinámica es bien simple. Un conjunto de artistas internacionales invitados (España, Argentina, Uruguay y Italia), muestran expositivamente y a manera de ejemplo sus respectivos barcos a los niños de Graus. Y les piden, a su vez, que creen los suyos y conformen un gran mural. En definitiva, se convierte esa bonita transversalidad y trabajo entre iguales. Por su parte, el Espacio Pirineos de Graus se transforma en un lugar mágico en el que decenas de barcos realizados desde diferentes estéticas, formas, símbolos y narrativas, configuran un gran puerto, una oda a las extraordinarias posibilidades de la creación.
Los barcos presentados a manera de ejemplo y los que pedimos que realicen los jóvenes artistas de Graus son realizados con un pretendido límite: el uso del blanco y el negro. Esto lo hemos planteado para reforzar aspectos plásticos que destaquen la forma frente el color. El color en ocasiones y en el arte de carácter infantil, resulta en muchas ocasiones excesivamente cosmético. Esto saca al niño de su zona de confort y le condiciona una creatividad más constructiva.
