Agentes de la Guardia Civil de Torla han detenido en Fiscal a dos personas por el maltrato animal de once gallos de pelea. Se les acusa de un delito de maltrato animal y otro de falsedad en documento oficial. Los supuestos autores transportaban once gallos combatientes españoles (gallos de pelea) cuyas crestas se encontraban mutiladas y, a su vez, mostraban heridas de diversa consideración causadas durante el viaje. Asimismo, la documentación oficial de los animales se encontraba manipulada.
Los hechos ocurrieron el pasado 20 de febrero en un punto de verificación de vehículos en el término municipal de Fiscal. Los agentes dieron el alto a un vehículo ocupado por dos personas. Durante el registro, los agentes encontraron en el maletero once cajas perforadas de cartón, que albergaban en cada una a un gallo de pelea con las cresta mutilada. Este hecho es muy común en los gallos combatientes españoles (gallos de pelea).
A su vez, los supuestos autores aportaron escasa documentación que avalase el descreste de los mismos y su transporte. Además, los animales presentaban heridas de diferente consideración a causa de las condiciones en su traslado.
En ese momento los agentes solicitaron la colaboración del Equipo SEPRONA y del veterinario de guardia de la DGA. Tras la observación de los animales, constataron que existían claras amputaciones de las crestas que no estaban permitidas ni documentadas. A su vez, argumentaron que las heridas y cortes que presentaban se debían a la falta de espacio en su transporte, no respetándose una distancia mínima de seguridad entre las cajas contenedoras de los animales, propiciando que dada su ferocidad, se agredieran entre ellos, atacándose durante el viaje.
Investigación y detención
Tras la investigación, los agentes comprobaron que la documentación aportada por los titulares de los animales no avalaba el transporte de los mismos. También comprobaron que el certificado oficial expedido por un veterinario sobre la mutilación de los gallos había sido manipulado. Por lo que dedujeron que el destino de este tipo de animal, dada su preparación física y estética, era competir en peleas clandestinas en Francia. A través de Bienestar Animal de la DGA, los gallos se depositaron en una nave.
Por todo ello, el pasado día 21 de febrero, agentes del Puesto de la Guardia Civil de Torla detuvieron a los dos supuestos autores de los hechos. Se trata de dos varones de 38 y 45 años, vecinos de Toulouse (Francia) y Madrid, respectivamente.
Las diligencias se instruyeron junto con los detenidos en el Juzgado Mixto de Instrucción de Boltaña, quedando los detenidos en libertad con cargos.