Cariñena 1-0 Sommos UD Barbastro
Cariñena es sinónimo de derrota para el Barbastro esta temporada, que ha visto cómo en sus dos enfrentamientos caía estrepitosamente sin poder hacer casi nada. El conjunto rojiblanco visitó el domingo La Platera y se encontró una trampa de la que le fue imposible salir vivo. Un gol tempranero en el minuto 11 hizo que los tres puntos se quedaran en tierras zaragozanas. Es la segunda derrota consecutiva.
Tarde soleada con buena temperatura que empezó con mucho balón llovido. Poco o nada se jugó en los primeros minutos del duelo. Ambos equipos buscaron el balonazo en largo y el Cariñena ahí salió ganando. Un partido de disparos al aire que el Barbastro no sabe jugar.
Josete Tomás hizo algunos retoques en su once inicial. Gistau ocupó la portería y Rafinha se fue al banquillo para dar entrada a Conte en el ataque. La falta de gol que padece el equipo volvió a evidenciarse una tarde más. El Barbastro sigue siendo el cuarto equipo de la categoría que menos goles anota (21), tan solo por detrás de Biescas, Giner y Borja.
El balón parado da dolores de cabeza. Tan solo transcurrían 11 minutos de partido cuando Iván Falo, que ya advertíamos en la previa que era el hombre más peligroso, recibía completamente un envío desde el córner que solo tuvo que rematar a placer, sin ninguna marca, para batir a Gistau. Un fallo defensivo incomprensible, de esos que te hace perder un choque cuando este apenas tiene ocasiones manifiestas. Imposible defender peor un balón parado. Después de ello, Gistau tan solo tuvo que intervenir yendo al suelo en una ocasión.
El juego en el centro del campo fue nulo. Los balones a la espalda de la defensa predominaron y el Barbastro estuvo incómodo hasta la llegada de la primera media hora. A partir de ahí, el equipo de Josete se fue encontrando y acomodando y trenzó varias buenas jugadas por el suelo. Héctor Otín cayó lesionado en el minuto 27 y Salcedo fue su sustituto.
En cualquier caso, ya se conoce que estos contextos no favorecen a los del Vero. Ya pasó en Robres, con un campo de reducidas dimensiones y ante un equipo que sabe muy bien jugar sus cartas. Ejemplo exacto el del Cariñena. Y ambos partidos se resolvieron con el mismo resultado (1-0). Josete, sabedor de lo que sucedía, pedía a gritos hacer “el campo grande” a los suyos.
Tras el paso por vestuarios el Barbastro salió a hacer daño por bandas. Arrinconó por momentos a su oponente pero no fue suficiente para ver puerta. Jorge Ruiz percutió por banda izquierda y colgó infinidad de balones, aunque los delanteros no tuvieron acierto. En uno de ellos, casi al final, un remate en el pico del área pequeña se estrelló en el poste. Sin suerte. El Cariñena reclamó un penalti por empujón de Limbeck.
Al final, segunda derrota consecutiva por la mínima que hace complicarse la salvación. El Cariñena se llevó, además, el golaverage particular (0-2 en Barbastro y 1-0 en Cariñena). Nueve finales por delante.
Cariñena: Viorreta; Utrilla, Navarro (Molinero), López, Pedro, Patrick (Lorente), Obere, Fonsi, Falo (Iván Lorente), Osanz y Cortés.
Sommos UD Barbastro: Gistau; Limbeck, Franki (Jorge Ruiz), Elbaile (Rafinha), Pablo López; Arnedillo (Peralta), Agus, Abizanda (Gulias), Otín (Salcedo); Conte y Perso.
Árbitro: Fernández Martínez. Amonestó a Utrilla, Obere y Cortés por el Cariñena y a Conte por el Barbastro.
Goles: Falo, minuto 11 (1-0).
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 25 del Grupo XVII de Tercera División disputado en La Platera de Cariñena. Agradable y soleada tarde de fútbol en Cariñena.
El Barbastro pone el candado en su defensa
