El pasado viernes 20 de diciembre se cumplieron 40 años de la inauguración oficial del Hospital Comarcal de Barbastro. El entonces ministro de Sanidad, Ernesto Lluch, cortó la cinta para dar por abierto un centro por el que el territorio había luchado durante un cuarto de siglo y que había entrado en servicio unos meses antes aquel año de 1984.
Las primeras referencias a la futura Residencia Hospitalaria en Barbastro se remontan a mediados de los años 60. En 1967 abre San Jorge en Huesca y en agosto de 1971, el doctor José Cardús dedica un amplio artículo pidiendo atención a este modelo. En los primeros 70, El Cruzado alerta de la “preocupante marcha de médicos y cirujanos de la ciudad”, ante el cierre de las clínicas que existían. Después, cada incidente y accidente sucedido en los siguientes años se relataba en las páginas de El Cruzado Aragonés subrayando la falta de este servicio sanitario.
Comenzaban entonces los primeros trámites, con un anteproyecto de Residencia Sanitaria en 1975 y la posibilidad de la instalación de un puesto de socorro. Al año siguiente comenzó la ofensiva ciudadana. En septiembre de 1976, la SMA lograba reunir un millar de firmas para pedir el centro hospitalario, una petición que suscribieron una quincena de asociaciones.
El año 1977, la Asociación Cultural del Somontano tomó protagonismo, con la edición de un póster y octavillas para exigir el hospital. ACUSO alentó la gran manifestación de principios de julio que desembocó en la dimisión del alcalde, Manuel Goméz Padrós. En agosto, El Cruzado repasó las gestiones para construir la Residencia Sanitaria, con un informe que recordaba que la primera petición se remonta a 1965. En 1974, la Caja de Ahorros ofreció financiación y los terrenos también estaban ya disponibles. Los había cedido al Ayuntamiento la empresa Fibrocinca: 25.000 metros cuadrados junto a la carretera hacia Berbegal.
De regreso al año 1977, se constituyó una Comisión Pro-Hospital, que fue recibida por el ministro de Sanidad en septiembre. Ya en 1978, se llegó a celebrar un pleno conjunto de las corporaciones de Barbastro y Monzón. Ahí pactaron, sobre la ubicación, que aceptarían “la decisión que adoptara el Ministerio de Sanidad y la Seguridad Social al respecto”. En octubre de aquel año se concedió la Residencia Hospitalaria. Eso sí, terminó habiendo un contencioso por parte del Ayuntamiento de Monzón sobre la ubicación, pues alegaban que los terrenos cedidos no eran urbanizables. En mayo de 1980, la sentencia avala la ubicación.
Los trámites continuaron en 1979: firma para la cesión de los terrenos, se aprueba la construcción y se adjudica la obra a la empresa Auxini por más de 459 millones de pesetas. A finales de año se firma el acta de replanteo para emprender las obras, que se alargaron durante los años 1980 y 1981. Después, llegaron las especulaciones sobre la fecha de puesta en marcha, entre concursos y adjudicaciones para material, equipamiento y dotación de personal. La entrega oficial de la obra tuvo lugar en agosto de 1982.
Un año más tarde, en octubre de 1983 se conoció que el director sería el doctor Luis Güerri y continuaron las apuesta por la apertura del servicio del nuevo hospital comarcal, que no llegó hasta septiembre de 1984. La inauguración oficial, tal día como hoy, un 20 de diciembre.