Desde que cerró sus puertas en 1996, la pregunta quedó en el aire: ¿qué hacer con el área del cuartel General Ricardos? Los terrenos quedaron en manos del Gobierno de Aragón (de la empresa Suelo y Vivienda) en 2006, cuando se lo compró por 4.473.273’30 euros a la Gerencia de Infraestructuras de Defensa y al Instituto de las Fuerzas Armadas. Entonces se planteó regenerar toda esa zona con viviendas (más de 600) y un polígono industrial denominado ‘blando’, para acoger empresas de servicios. El convenio se firmó en octubre de 2008, entre los entonces alcalde de la ciudad, Antonio Cosculluela, y el consejero de Obras Públicas del Gobierno de Aragón y presidente de Suelo y Vivienda, Alfonso Vicente.
Según recogíamos en nuestras páginas, los firmantes coincidieron en señalar que era “un día importante para la ciudad porque hemos llegado a la primera parte del objetivo, fruto del trabajo y esfuerzo conjunto de técnicos y políticos para sacar adelante este proyecto complejo que es una apuesta de futuro”. Y es que se preveía destinar una superficie máxima del 70 por ciento para uso residencial y el 30 para uso terciario. Las estimaciones hablaban de 670 viviendas, de las cuales 300 serían protegidas, y que “la construcción se haría por fases, en función de la situación del mercado en cada momento”.
El convenio también recogía que el cambio de calificación del terreno sería lo que financiaría la construcción de vivienda protegida, la transformación urbanística de la zona y la provisión de dotaciones locales. De hecho, la crónica de El Cruzado hablaba de que “las plusvalías urbanísticas que genere esta operación se invertirá en Barbastro y citó los casos concretos del nuevo Colegio de Infantil y Primaria, que se construirá en la calle Luis Buñuel”.
DATO
70%del terreno se destinaría a uso residencial; el 30 por ciento restante, para uso terciario.
Los plazos marcados eran los del Plan de Reforma Interior, aunque “sin fechas políticas concretas”, se manifestó la intención de que “las primeras viviendas se construyan en esta legislatura”. Según el convenio, Suelo y Vivienda asumiría el coste y ejecución de las dotaciones: infraestructuras de conexión con redes generales de servicios, ampliación y reforma de las actuales y potabilización, suministro y depuración de aguas. Por su parte, el Ayuntamiento se comprometía a tramitar el Plan General de Ordenación Urbana, con más espacios verdes.
En el acto de firma y presentación del convenio, se habló también del pabellón principal, que se destinaría a usos socio-culturales. El consejero, Alfonso Vicente, asumió el compromiso de “conservarlo en condiciones adecuadas para evitar el deterioro progresivo del edificio más emblemático del cuartel General Ricardos”, según publicábamos aquel 18 de octubre de 2008.
DATO
4,47millones de euros pago el Gobierno de Aragón a la Gerencia de Infraestructuras de Defensa y al Instituto de las Fuerzas Armadas por los terrenos del cuartel
Y cuando a finales de julio de 2009 finalizaban las obras de demolición, ese fue el único edificio que quedó en pie. En la crónica de esa noticia, se recordaba que Una vez culminado el proceso de demolición y el tratamiento de residuos, Suelo y Vivienda de Aragón ha acordado el encargo del proyecto de urbanización de los terrenos para presentarlo en el Ayuntamiento de cara a su aprobación. El alcalde Antonio Cosculluela es optimista sobre las previsiones de que los trabajos comiencen en el año 2010, sin demoras. Mientras tanto, se han realizado las tareas de reparación de la cubierta del pabellón principal, cedido al Ayuntamiento de Barbastro que tiene previsto estudiar el uso con la Comarca de Somontano.
Ahí se quedó el proyecto. La crisis económica de esos años hizo que la idea se quedara en los cajones y que ahora, por fin, pueda retomarse, aunque sea por fases.