El pasado sábado, el Grupo Ecologista del Somontano realizó el primer ‘colillón’ en el entorno del hospital. Consiste en recoger las colillas y concienciar del simple gesto de contaminación que supone tirarlas al agua o suelo. En menos de 20 metros recogieron 4 litros de colillas. El filtro de las colillas está hecho de acetato de celulosa. Es una sustancia que tarda más de una década en biodegradarse y cuando lo hace desprende las sustancias nocivas que llevan los cigarrillos: arsénico, plomo, nicotina, etc.

Las colillas, además de ser visibles en la naturaleza, contaminan el suelo, el agua dulce y acaban en el mar donde son ingeridas por los peces. Y es que una colilla puede contaminar 50 litros de agua. Por lo tanto, al final acaban en nuestra comida. Con el fin de concienciar sobre este gesto, el Grupo Ecologista del Somontano tiene intención de realizar varias recogidas de colillas.

Cada vez hay más colillas en el suelo, muchas de ellas están en lugares donde los servicios de limpieza no las pueden recoger periódicamente. Se ha visto a fumadores tirar colillas en parques infantiles, en ríos, en pantanos, alcantarillas, etc. Unas acciones que han indignado a muchos vecinos.

Con está acción, el grupo ecologista quiere concienciar del impacto de las colillas en el medio ambiente. Reclaman un mayor control control y cumplimiento de la normativa por parte de las autoridades y visibilizar la cantidad de colillas que se tiran cada día.