Fiesta para la nueva añada de Alquézar rosado. Se han presentado en Bodega Pirineos las nuevas añadas de Alquézar Rosado y Alquézar Blanco. Esta bodega, fiel a su estilo, convirtió la presentación en un evento social que reunió a gentes del vino, de la política, agroalimentación, hostelería y periodistas.
Alquézar rosado y Alquézar blanco resultan unos vinos inconfundibles por su delicada aguja. En esta ocasión salen a la luz con una imagen renovada, rejuvenecida dispuesta a reposicionarse en el mercado. El Alquézar rosado ha vendio más de cuatro millones de botellas, todo un hito para un rosado.
Alquézar Rosado 2022, atractivo y luminoso
De color rojo intenso, muy brillante, desprende una fina burbuja cuando lo vertemos en la copa. Es un vino que nos atrae por su aroma y por su paso por la boca.
Sus aromas dulces a regaliz rojo, cerezas, fresas y chucherías se ven acompañadas por una boca llena de sabor y suave dulzor. Equilibrio perfecto.
En palabras de Jesús Astrain, enólogo de Bodega Pirineos: “Alquézar rosado 2022 recoge toda la luz del Somontano. Con un color rojo frambuesa muy atractivo y luminoso. En nariz es todo aromas de frutas, procedentes del tempranillo y cabernet, regaliz rojo, fresas, chucherías. Una boca amable y provista de un rico dulzor se equilibra con la presencia de una suave burbuja que lo hace muy apetecible para beberlo muy frío. Todo sabor y equilibrio, para un vino ya mítico en el Somontano”.
Siempre compañero del Alquézar Blanco, comparte con éste su apetecibilidad. Vinos diseñados para dar placer y para ser disfrutados con todos los sentidos.
Alquézar Blanco 2022, la explosión del Gewürztraminer más desenfadado
Este vino nos refleja todo el potencial de esta vendimia 2022. Amarillo pálido con tonos verdosos, fragante nariz con toda la expresión varietal de los mejores Gewürztraminer del Somontano.
Según Jesús Astrain, enólogo de Bodega Pirineos: “Alquézar blanco, como es tradición, es el primer vino que aparece en el mercado una vez finalizada la cosecha. Se trata de un vino blanco de color amarillo verdoso con aromas varietales a cítricos, flores y especias de gran finura. Con una suave entrada por los azúcares residuales que proceden del mismo vino, es una gran concentración de sabor cuando su fina burbuja estalla en la boca. Para beberlo muy frío y combinar con aperitivos, pescados, comida asiática, etc. Un vino delicioso.
Nueva imagen: explosión de la chispa de Somontano
Alquézar se diferencia de los demás vinos de Bodega Pirineos por esa chispa especial que le da el carbónico de su propio proceso de fermentación. Esta explosión es lo que se ha querido destacar en su nueva imagen donde se potencia la calidad del vino dando mayor protagonismo a la marca.
