“Los proyectos de plantas fotovoltaicas en el Sobrarbe son incompatibles con el modelo de desarrollo que en los últimos años se ha trabajado y consolidado en esta comarca. Está permitiendo a los pueblos mantener población e incluso en algunos de ellos crecer”. Con estas palabras, Miguel Gracia, Presidente de la Diputación Provincial de Huesca, ha resumido las importantes afecciones que los cuatro parques fotovoltaicos previstos sobre todo en los términos municipales de La Fueva y de Palo tienen para este territorio.
Así se lo han trasladado en la reunión que este martes han tenido en Madrid tanto el Presidente Miguel Gracia como los representantes municipales del Sobrarbe; Enrique Pueyo, alcalde de Aínsa; Begoña Dorado, la alcaldesa de Palo; y Carlos Espluga, concejal del Ayuntamiento de La Fueva, a Francés Boya, Secretario de Estado para el Reto Demográfico; e Ismael Aznar, Director General de Calidad y Evaluación Ambiental. El encuentro ha tenido lugar en el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico.
En estos dos municipios del Sobrarbe están previstos cuatro parques fotovoltaicos y dos líneas de evacuación. El impacto visual que estas infraestructuras suponen es importantísimo dado que están prácticamente unidos. Además, forman un área conjunta y afectan a zonas de cultivo agroganadero. Así se lo han transmitido al Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, si bien solo uno de estos parques sería competencia de la Administración central al superar los 50 MW. Los otros tres son competencia autonómica y es el Gobierno de Aragón a quien corresponde su autorización.
Turismo sostenible
Los representantes municipales del Sobrarbe han explicado la situación de la única comarca pirenaica de Aragón que no cuenta con estaciones de esquí. “Sin embargo, ha encontrado un modelo de desarrollo socio-económico basado fundamentalmente en un turismo sostenible y respetuoso con el entorno natural que lo sustenta. Y una actividad ganadera que familias del Sobrarbe han mantenido y trabajado”. “La pérdida de terreno cultivable es una clara amenaza que está ligada a la ejecución de estos parques solares”, han argumentado.
También han recordado que mientras se está realizando un gran esfuerzo para mantener infraestructuras y equipamientos acordes a un modelo de turismo sostenible y que es característico ya del Sobrarbe, “el hecho de desarrollar estos parques supondrían unas afecciones que sin lugar a dudas serían muy perjudiciales dados los impactos paisajísticos, ambientales, visuales, con un gran perjuicio socioeconómico para toda esta comarca, tanto en pernoctaciones como en restauración”.