Esta oración es un encuentro silencioso y profundo con Dios, en el que simplemente estamos en su presencia sin necesidad de palabras. Es la forma de oración en la que aprendemos a descansar en el amor de Dios, sintiéndonos abrazados por Él y experimentando su paz en lo más profundo del corazón. Es una forma de oración en la que nos abrimos completamente a la presencia de Dios.
A diferencia de la oración vocal o meditativa, la contemplación no busca hacer peticiones ni reflexionar sobre un texto concreto. En lugar de ello, el alma descansa en el amor de Dios, en una especie de diálogo silencioso en el que las palabras se desvanecen y prevalece el lenguaje del corazón. La oración contemplativa es a menudo descrita como una simple y pura mirada de amor a Dios, donde dejamos que Él tome la iniciativa y nosotros nos limitamos a responder en silencio. Esta oración requiere una disposición especial y suele surgir como fruto de una relación profunda y comprometida con Dios. Es una oración en la que el Espíritu Santo nos guía hacia la experiencia de la presencia de Dios en nuestra alma.
Algunas de las prácticas más conocidas de la oración contemplativa en la Iglesia incluyen:
- Adoración Eucarística: Es la adoración del Santísimo Sacramento ante la presencia real de Cristo en la Eucaristía. Allí nos encontramos con Cristo de una manera íntima, siendo conscientes de que Él está verdaderamente presente y desea comunicarse con nosotros.
- Oración del Corazón: También llamada oración de Jesús, esta forma de oración consiste en repetir una frase corta como “Señor Jesús, ten piedad de mí”, hasta que se convierta en el susurro de nuestro propio corazón. A través de la repetición, el orante se adentra en una paz interior y en una experiencia de Dios que va más allá de las palabras.
La oración contemplativa transforma el alma de una manera profunda. Dejamos a un lado nuestras preocupaciones para simplemente estar con Dios. En silencio escuchamos su voz, experimentamos su paz y fortalecemos nuestra confianza en Dios. Nos renueva el corazón y nos ayuda.