La sección de barranquismo del MAB ha organizado un curso de barranquismo estructurado en dos bloques, diferenciados por nivel. El primero corresponde al nivel 1 y el segundo, de mayor dificultad, al nivel 2. Durante el pasado fin de semana, llevaron a cabo la actividad correspondiente al nivel 1, que combinó formación teórica y práctica.

El viernes 28 de febrero, impartieron una sesión teórica de dos horas y media. En este espacio formativo, explicaron a las personas inscritas diversos aspectos relacionados con la práctica del barranquismo. Entre los temas abordados, incluyeron el equipo necesario, la planificación previa a la salida, los nudos esenciales, las instalaciones y equipaciones, las técnicas de rápel, la progresión en el barranco, la comunicación durante el descenso, la seguridad y la conservación del entorno natural.

El sábado 1 de marzo, trasladaron al grupo al rocódromo de la Escuela Refugio de Alquézar, donde dedicaron la jornada a la práctica. En esta sesión, mostraron cómo realizar diferentes tipos de nudos y enseñaron diversas técnicas de rápel, prestando especial atención a los bloqueos y maniobras que permiten realizar un descenso seguro.

El clima modificó la hoja de ruta

La programación prevista para el domingo incluía un descenso real de barranco. Sin embargo, las condiciones meteorológicas no resultaron favorables, lo que obligó a modificar la actividad. Finalmente, realizaron prácticas de maniobras en el rocódromo cubierto del polideportivo de Ángel Orús, debido a que el espacio de la Escuela Refugio de Alquézar ya se encontraba reservado.

En total, participaron cinco personas que contaban con cierta experiencia previa. Al finalizar, comentaron que algunas de ellas descubrieron que no estaban tan preparadas como pensaban inicialmente, y que la formación recibida les había resultado útil. Tienen previsto continuar su aprendizaje en el próximo bloque, correspondiente al nivel 2, dentro del mismo curso de barranquismo organizado por la sección de barranquismo del MAB.