Uno de los proyectos turísticos que más ampollas está levantando es la futura construcción de la telecabina que unirá la localidad de Benasque con Cerler. La Asociación de Vecinos y Amigos de Cerler-Pico Sarllé reclama desde hace mucho tiempo un estudio de impacto económico y social para este plan turístico. “Es un proyecto de envergadura y nos perece lógico que, existiendo un estudio medioambiental, también haya uno social para ver qué repercusiones tiene sobre el comercio, el empleo, los hoteles, casas rurales… Lo que no queremos es darnos cuenta una vez hecho”, subraya Lucas Dambraz, presidente de la asociación. 

Y no será porque no lo hayan pedido. “Desde que creamos la asociación (hace dos años y medio) hemos mandado más de 50 instancias al Ayuntamiento para diversos temas y sólo nos han contestado a seis. La realidad es esa. Nos cabrea y no nos hacen ni caso”, resalta.

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Todavía hay muchos flecos sin cortar, y esto hace desconfiar a la asociación ya que, por ejemplo, no saben si la telecabina será un servicio público. “Se nos vende que será utilizada durante todo el año, pero no sé si va a ser así en realidad. Quieren desestacionalizar y van a abrir actividades con bicis de montaña en la estación… Eso nos parece perfecto. Habrá que ver si el servicio funciona en verano, por ejemplo, con unos horarios amplios. Porque si la telecabina se pone en marcha a las 8 de la mañana y luego no vuelven a abrir hasta las 17 o 18 horas, para volver a subir a la gente que baja a Benasque a comprar o al médico, no tiene ningún sentido. No tenemos ninguna seguridad de que vaya a ser así”, recalca.

Dudas con la subvención

La inversión es otro tema a tener muy en cuenta. La subvención europea es de un montante de 10,1 millones de euros y, según afirma Dambraz, el coste real de la telecabina rondará los 13 millones. “Este presupuesto no es reciente y con la subida de materias primas y de los costes de carburantes, va a costar más de 13 millones. El presupuesto se va a disparar mucho más. ¿Quién va a poner la diferencia?”, se pregunta.

Numerosos desperfectos

En clave local, la cosa no queda ahí. La política de gasto e inversión por parte del Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Benasque en el valle tampoco es la adecuada según esta Asociación. Dambraz plantea que el presupuesto de ampliación de la estación de esquí hacia el valle de Castanesa supone una cantidad que ronda los 40 millones de euros. “Si se construye la telecabina se va a gastar también bastante dinero en complementar la aportación de la comunidad europea. Esto es mucho dinero. Sin embargo, Cerler, que es un pueblo que desde hace 50 años se ha involucrado a tope para promocionar la estación, vendiendo sus tierras y reconvirtiendo sus actividades… Esta gente, al final, no se ve recompensada. El pueblo está abandonado por su Ayuntamiento”, lamenta. 

Uno de los temas que más preocupa a Dambraz es la fase 1 de la llamada urbanización de Cerler: “Está hecha un desastre. La tenía que terminar el Grupo Aramón (el mantenimiento le incumbe a Aramón) y la tiene empantanada. Hay cortes de luz, hay un depósito de agua potable que está sin hacer, las alcantarillas están destrozadas, hay malos olores cuando viene mucha gente, las aceras están sin hacer, el firme de las vías está destrozado… Y no se arregla”. 

La Asociación ha intentado en numerosas ocasiones ponerse en contacto con los responsables para subsanar los daños, “pero nos dirigimos al Ayuntamiento y éste le echa la culpa a Aramón. Y cuando nos dirigimos a Aramón, al revés. Se pasan la pelota el uno al otro y, mientras tanto, la casa sin barrer”. Por todo ello, deja claro que sus vecinos están “muy cabreados, porque ven que se van a gastar cantidades de dinero muy importantes en otras cosas y no hay dinero para el pueblo que se la ha jugado hace 50 años”.