El Ayuntamiento de Peralta de Alcofea denuncia que el Gobierno de Aragón adeuda 6.000 euros al municipio de la subvención del comedor escolar, que da servicio a los alumnos del colegio. Según informan, la cuantía corresponde al curso pasado (2023-2024) y al actual (2024-2025). Sergio Gombau, alcalde de la localidad, explica que el Ayuntamiento «está asumiendo competencias que tendría que estar desarrollando la DGA. Si el Departamento de Educación pagara con regularidad, cubrirían el 50 % del servicio, el resto lo costea el consistorio con fondos propios».
Gombau añade que considera que se trata de un «trato discriminatorio hacia las familias que viven tanto en este pueblo como en otros del medio rural altoaragonés. Unas familias que están pagando un precio más elevado por llevar a sus hijos al comedor que quienes lo hacen en una población más grande”. Así, asegura, «es normal que al Gobierno de Aragón le salgan las cuentas, los ayuntamientos rurales somos su cuenta de crédito sin intereses».
A su vez, denuncia que este no se trata de un caso aislado: «Colegios rurales agrupados de la comarca de Somontano y de toda la provincia se encuentran en la misma situación. En vez de ayudar, la DGA nos da verdaderos quebraderos de cabeza. Para tener una escuela digna y ofrecer a los niños los mismos servicios que disfrutan quienes viven en núcleos más grandes, lo que recibimos no es apoyo, son más cargas administrativas y una subvención infradotada».
La lucha contra la despoblación
Por otro lado, indice en que «se puede luchar contra la despoblación, pero con partidas presupuestarias que nos acompañen y que nos permitan desarrollar los servicios desde el territorio. Nuestro municipio, como otros municipios pequeños, estamos creciendo en población, porque desde los consistorios ponemos dinero y asumimos todas esas competencias impropias. Unas competencias que está más que demostrado que ayudan a conciliar la vida familiar y laboral, a iniciar y mantener servicios, en definitiva, a crear puestos de trabajo y a asentar población».
Por último, Gombau denuncia que «el Gobierno de Aragón nos está abandonando y dirigiendo el dinero hacia las ciudades donde sí les salen las cuentas. Si el dinero que se están gastando en la nueva Romareda y en incrementar la financiación a la ciudad de Zaragoza nos lo repartieran para los pueblos, multiplicaríamos los panes y los peces». Y concluye: «Las políticas actuales de la DGA ayudan a vaciar aún más la mal llamada España vaciada».