El obispo Ángel Pérez Pueyo adelantó que tienen un programa preparado para ver los bienes eclesiásticos en el Museo Diocesano de Barbastro-Monzón. Aunque «se anunciará en su debido momento», señaló el prelado que están preparando un plan para hacer visitas a las obras devueltas por Cataluña.
Durante la entrega del premio Magister Extraordinario al Obispado y Gobierno de Aragón, el obispo aseguró que él, simplemente, ha sido “un eslabón más dentro de una cadena de tanto trabajo y tantas instituciones” y que siente “vergüenza personal y orgullo instituciona”.
Ángel Pérez Pueyo fue el primer obispo en recurrir a los tribunales civiles la devolución de los bienes eclesiásticos aunque eso no le supuso ningún desgaste ya que “solo buscaba que resplandeciera la verdad y se hiciera justicia, es decir, que se ejecutara lo dictado por la Iglesia“. “Esto es una fiesta para todo Aragón porque se lo debíamos. Han sido todos los aragoneses los que han hecho posible este milagro, señaló. En su discurso durante la entrega del Magister, se refirió a las obras depositadas en el Museo como “un patrimonio hacia Dios y en una Diócesis itinerante”.
El obispo apeló a la belleza de la que habla el ilustre escritor ruso Dostoievski en su novela El idiota. Su lectura deja en el alma la convicción de que una de las razones del gran legado que ha dejado el pensador ruso es su permanente búsqueda de Dios y de la belleza. A fin de cuentas, para el literato, vienen a ser lo mismo.
Educación
Como el sindicato que entregó los premios trabaja exclusivamente para la educación, quieren que la mejor inversión sea de cara al futuro. Así, el FSIE proponen conocer el Museo Diocesano y su colección como aprendizaje práctico. Y como ejemplo de coherencia de un trabajo que ha llevado más de dos décadas.
“El fin último de la enseñanza nos lleva a preguntarnos sobre cómo trabajar para conseguir personas más responsables y felices. A eso se le puede ayudar explicando el trasfondo del proceso desde el tesón. Desde la paciencia, la confianza en los argumentos y la fe en la justicia. Habrá que recordarles a los chicos y chicas que nada viene sin esfuerzo pero también que el esfuerzo genera una recompensa”, explican desde el sindicato.
“Es una iniciativa extraordinaria y va a ser el comienzo de nuevos proyectos y nuevas ilusiones que harán posible que este Alto Aragón tenga más sostenibilidad y esperanza de futuro”, apuntilló Pérez Pueyo.