Sommos UD Barbastro 2-0 CF Épila
Serio, firme, dañino y contundente. El Barbastro mostró una gran imagen ante el Épila y consiguió su tercera victoria consecutiva con la que certificó su buen estado de forma. Los goles de Perso y Arnedillo en el primer acto rubricaron uno de los mejores partidos de la temporada en el Municipal. Un golpe de autoridad para afrontar el último mes de competición con las mejores sensaciones.
Muy pronto encarrilaría el Barbastro una tarde fresca pero soleada. Un robo en campo propio acabó en un saque de banda muy cerca del área visitante. Abizanda recogió el cuero y asistió a Perso que, tras un giro habilidoso en el interior del área, batió por bajo al exrojiblanco Victor Otín. En la siguiente jugada, el colegiado anuló un gol al Épila por un claro fuera de juego.
Pudo ampliar Agus la ventaja en un remate de un centro lateral de Limbeck, aunque el balón se fue rozando el travesaño. Los de Josete demostraron un día más que esos envíos desde los costados son caramelos.
Para entonces el Barbastro ya estaba mostrando una versión muy firme y seria, en la que combinaba el juego de posesión, las disputas y las contras cuando el Épila se volcaba más en ataque. Un Épila que todos saben que no se guarda ni un esfuerzo en el vestuario y que exprime a su oponente hasta el final.
Los locales asestaron la puntilla con un gol cuando más daño hace: antes del descanso. Córner en corto, centro medido de Limbeck –una vez más– y remate de Elbaile al larguero. El rechace se quedó en el área pequeña y Arnedillo, el más listo de la clase, estuvo astuto para empujar el balón y hacer el segundo. Un premio individual a un trabajo en la sombra, que no siempre se ve, pero que dota al conjunto de fiabilidad en la medular.
En la segunda parte, monólogo del Barbastro en el primer cuarto de hora. Otín tuvo que sacar con una palomita un libre directo desde la frontal del área botado por Perso. En el 58′, Rafinha también tuvo la suya en un remate entrando por banda derecha. Un minuto más tarde, nueva ocasión clara del Barbastro, esta vez de Abizanda. El jugador cedido por el Huesca recibió dentro del área, recortó hacia adentro y remató abajó al palo corto de Otín. El meta sacó un mano prodigiosa para enviar a córner.
En el 65′, nueva internada por banda derecha de un Rafinha muy protagonista. Recorte y golpeo con pierna zurda que parece estrellarse en la mano de un defensor. Ahí se reclamó un penalti que el árbitro no consideró como tal. Ahí se le escaparon las opciones al hispano brasileño de estrenarse en casa como goleador.
De ahí hasta el final, poco que llevarse a la boca. Y casi que fue lo mejor. Porque al Barbastro le convenía que no ocurrieran cosas. Dejó la portería a cero por segunda jornada consecutiva y sumó la tercera victoria seguida. Un golpe de autoridad a falta de cuatro citas para el final.
UD Barbastro: Gistau; Limbeck, Elbaile, Franki, López; Arnedillo, Agus, Rafinha, Abizanda; Perso y Conte.
CF Épila: Otín; Crespo, Oli, Gil, Rupérez, López, Hamza, Adán, Redondo, Puig y Losfablos.
Árbitro: Mihaita Haghiac. Amonestó a López y a Franki por el Barbastro y a Redondo, Crespo, Gil y Hamza por el Épila.
Goles: Perso, 1-0 (minuto 6). Arnedillo, 2-0 (minuto 44).
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 30 del Grupo XVII de Tercera División disputado en el Municipal de los Deportes de Barbastro en una tarde fresca pero soleada.
El Barbastro busca encarrilar la permanencia ante el Épila
